En Febrero, salió a relucir en todo su esplendor, una de las leyes de Murphy: “Cuando se piensa que las cosas no pueden ir peor, empeorarán”.
Las bolsas mundiales.
Han seguido su caída en picada. Los mercados no reaccionan favorablemente a los millonarios planes de rescate. No parecen creer en su efectividad.
La sensación que pueden seguir destapándose ollas (a muy alta presión), parece seguir presente.
Breve resumen de lo que va corrido del año, al 28 de Febrero: Europa cae, en promedio, alrededor del 16% y Asia hace lo propio, en 8%.
En USA, su S&P 500, cae nada menos que 18,62%, arrastrando a México a una baja del 20,68%.
De mi lista de control, sólo 2 muestran resultados levemente positivos: Chile (+3,88%) y Brasil (+1,69%).
Pero ya ha pasado una semana de Marzo, y la cosa sigue de mal en peor. Hoy por hoy, todas las bolsas muestran un resultado negativo.
Los Fondos de pensiones.
Resultados mixtos, como dirían algunos. En una AFP (ya sabemos que todas siguen tendencias similares), en Febrero se tuvo
una rentabilidad real ajustada por IPC (que no es lo mismo que ajustada por UF pues ésta está desfasada algo más de un mes) de:
Fondo A -3,51%
Fondo C +0,14%
Fondo E +3,02%
¿Y lo que va corrido de Marzo? Pues todos los Fondos con resultados negativos.
El caso Citigroup
En USA se está produciendo una nacionalización de la banca, en forma no planificada ni deseada. El Citigroup (¡quién lo iba a decir!), está ya en un 36% en manos del Estado. Y como condición, los accionistas no recibirán dividendos por un período indeterminado. No está demás recordar lo que comenté el 25 de Septiembre de 2008 (El hombre no aprende).
A pesar de haber recibido bastantes millones del plan de rescate, no levanta cabeza. Los accionistas han visto desvanecerse su inversión. Hace un par de años, sus acciones valían US$56 cada una. Hoy valen menos de 1 dólar.
Otros bancos, ahora en Inglaterra.
Lloyds: el 70% de la propiedad del banco ya está en manos del Estado
HSBC: No ha requerido salvatage. Sus utilidades bajaron en un 62%, pero utilidades al fin.
AIG, otra vergüenza. Pérdidas en el año 2008 de 100 mil millones de dólares. Sin comentario.
General Motors. Su firma auditora indica que ni con salvatage, creen que pueda sobrevivir.
El tipo de cambio. Tan difícil de predecir como el comportamiento de las bolsas. En 2 meses, el peso mexicano se devalúa de 9 a 15 $/dólar. Y el chileno, se revalúa: de 650 a 596 en el mismo período de tiempo.
Comentario reiterativo: ¿Por qué el Estado debe salvar las grandes corporaciones?
Pensemos en el mismo caso del Citigroup: El Estado de USA garantiza los depósitos hasta por US$ 250.000. Una familia de 4 personas, toma depósitos a nombre de sus miembros, con lo cual tiene una garantía de 1 millón de dólares.
Si se deja caer al Citigroup, igual el estado va a tener que ponerse con una millonada por la garantía estatal. Además el impacto que tendría en el sistema financiero sería mayúsculo. Y la cesantía de todo su personal directo y empresas que le prestan servicios. De hecho, dicen que haber dejado quebrar Lehman Bothers fue un error.
Ahí veo la lógica del salvatage, como un mal menor. Al parecer, su costo (no sólo económico, sino social) sería menor que si se deja operar en forma ortodoxa las fuerzas del mercado: ¡Que caiga todo el que debe caer! Lo mismo se aplica a General Motors, Ford y una larga lista de etcéteras.
Como leí en un artículo, mientras las empresas y corporaciones tienen un tamaño “razonable”, el libre mercado tiene opción de operar como se espera. Si quiebran algunas de ellas por haber sido mal gestionadas, el sistema sigue su curso, con consecuencias menores.
Con las mega corporaciones y una globalización totalmente desregulada (no me opongo a ella, pero manteniendo cierta cordura), se ha llegado que los intereses corporativos y los del país, lleguen a entremezclarse y confundirse. Y lo que estamos viviendo tiene, en buena medida, esa causa.
¿Podemos hacer algo? No a gran escala, pero aportar pequeños granos de arena que, al final, pueden hacer una playa.
Personalmente me niego a comprar azúcar Líder, usar tarjeta Presto o abrir una cuenta corriente en el Banco Ripley. Pienso: cada cual que se dedique a lo suyo. Las grandes tiendas, a vender productos. Los bancos, a ofrecer cuentas corrientes y créditos. Iansa a producir azúcar y Colún productos lácteos. Aunque tengo claro que debo estar dispuesto a pagar algo para hacer efectiva esta modesta manifestación de rebeldía.
Seamos mal pensados.
Me siento más confortable pensando que la mayoría de las personas actúa de buena voluntad, que viendo conductas torcidas por todos lados.
Pero ¿es posible el siguiente escenario? (por mencionar un solo ejemplo): Quienes tienen la autoridad de aprobar los planes de rescate, son los mismos que tienen acciones en el Citigroup. Por ahora, han visto que su inversión prácticamente ha desaparecido. Y aprueban el salvatage, con dineros del Estado (o sea de todos nosotros), como una manera de recuperar más adelante, lo hasta aquí perdido.
Tiendo a evitar entrar en consideraciones de este tipo, por resultarme repulsivas. Duermo más tranquilo pensando en mi argumento anterior sobre la lógica del salvatage. Cierto es que no tengo evidencia ni de una, ni de otra.
Menciono esta opción para manifestar que no me cierro a la posibilidad que la realidad pueda ser distinta a como me la imagino.
Sobre Educación
Hace 13 años
Bueno y Buenos en general tus articulos Victor, desde mi punto de vista interpretan la cara optimista de mis propios pensamientos a este respecto. Desgraciadamente la realidad del mercado laboral, especialmente en el Norte no me permite ser muy optimista de la salida de la Crisis ya que no veo soluciones mas alla de "subsidiar" mediante modestos regalos de plata a los supuestos mas pobres. Me gustaria ver y SENTIR una real politica de fomento a la actividad que genere mano de obra. Sueño del Pibe quizas pero sueño al fin.
ResponderEliminarUn Abrazo amigo.
Sergio Vargas
Carlos Valdés comentó:
ResponderEliminarTus comentarios me hicieron volarme con algunos pensamientos que estimo son comunes o están enfocados al mismo hecho.
Hay que poner las barbas en remojo con los monopolios y monopsonios.
Caso: concentración del retail en pocas manos.Cadenas farmaceúticas, etc.
Asfixian al productor pequeño, se apropia de su renta y de paso manejan los precios, evidentemente, despojándonos también, parte de nuestra renta (todos los consumidores) y la ley de libre competencia la administran los humanos.
Con la integración de negocios, aguas arriba, aguas abajo y transversales, cada vez propendemos a una solapada esclavitud y habrá generaciones que podrían volver a las fichas de las salitreras.
Te planteo un tema: ve quienes son los directores de las empresas del Estado y S.A. y que hicieron antes y después de eso.
Revisa sus decisiones y a quien favorecieron. Otro tema: El loby, que yo llamo venta de influencias, también es interesante.