El tercer retiro
Uno de los tantos hechos que deja en
evidencia que nuestro Chile ha perdido totalmente la brújula.
· Descontento social generalizado.
· Polarización.
· Incapacidad de la clase dirigente
para concordar una visión compartida de fututo.
· Visiones de la sociedad totalmente
contrapuestas imposibles de compatibilizar.
· Desconexión de los políticos con la
ciudadanía.
· Una desigualdad no sólo económica,
sino que de trato, que parece haber llegado al límite tolerable.
· Interés de los políticos de
sobreponer sus intereses personales (ser elegidos) por sobre el interés
nacional. Populismo.
· Podría ser una lista interminable,
pero sólo agregaré una pandemia que tanto en Chile como en casi todo el mundo, no
se tiene ninguna claridad de cómo manejarla: compatibilización de la parte
sanitaria con la económica, que van en sentidos totalmente opuestos.
Sobre el
retiro del 10%
Hay acuerdo que es una mala política
pública, pero hay quienes necesitan con urgencia recursos para sobrevivir sacando
recursos de donde sea.
El Gobierno ha diseñado ayudas, tratando
de focalizar en quienes realmente lo necesiten, lo que académicamente me parece
impecable. Pero la dura realidad es que no se tiene la información para una
focalización efectiva, rápida y entendible. Y se le ha dado curso tardíamente.
Es tan injusto decir “que el Gobierno no ha hecho nada”, como alegar que ha
hecho enormes esfuerzos para aliviar la angustia de muchos. Por otro lado, los
recursos son limitados, hay que actuar responsablemente entendiendo que las
ayudas nunca serán consideradas como suficientes.
Y sacar las platas de las AFP es muy
popular. La mayoría prefiere el dinero hoy en la mano que tenerlo para una
futura pensión, que la mayoría sabe que será muy baja (las razones las he
tratado en artículos antiguos). Por lo tanto, para muchos políticos…lo popular,
si lo abraza o lo promueve, son votos que andan buscando para la reelección o
para su tienda política.
Como lo indiqué en el artículo relativo al
primer retiro, y dadas las especiales circunstancia, no me oponía a ese
retiro para quienes realmente estaban urgidos y lo necesitaban, y que se trababa de una única vez.
Ya ven cuan creíbles son los políticos:
vamos en el tercero y la señora Jiles, con una actitud irónica y desafiante, al
ser aprobado por la Cámara de Diputados, mostraba con sus manos que vendría un
cuarto, un quinto…
¿Puede haber algo más insensato que
mientras llevan años discutiendo un nuevo sistema de pensiones (tardanza
absolutamente inmoral), que debe necesariamente aumentar el monto de las
cotizaciones, se esté echando mano a los fondos hoy existentes con absoluta
liviandad?
El efecto
de esos 3 retiros
Así como está el sistema de pensiones hoy, el efecto de esos retiros en las jubilaciones depende de la situación de cada cual.
Hice algunas simulaciones con tres supuestos: a) Que la persona tiene un sueldo parejo durante toda su vida laboral, b) Que no tiene lagunas previsionales y c) Que empezó a cotizar a los 25 años. Veamos 3 casos:
- Ø Hombre de 31 años y un sueldo imponible
de $500.00 (no son pocos que están en situaciones similares). Hace los 3
retiros (uno el 2020 y 2 el 2021) y por su sueldo y edad no tiene en su cuenta
un saldo que le permita retirar el 10% (no supera los $10.000.000). Por lo tanto
retira $1.000.000 cada vez. Al jubilar a los 65 años su pensión será 20%
menor que si no hubiera efectuado los retiros.
- Ø Hombre de 45 años con un sueldo imponible
de $1.424.000 (clase media). Por su edad y sueldo, tiene capital como para
retirar el máximo: $4.400.000 cada vez. Por haber retirado los fondos, su
pensión se verá reducida en 16%.
- Ø Y el mismo caso anterior, pero si
tuviera 60 años el año 2020: Su pensión será menor sólo un 8% que si no
hubiera efectuado los 3 retiros.
Sobre este tercer retiro, hay dos aspectos
que me parecen inaceptables, además de tener mis dudas de la constitucionalidad
de los acuerdos que está tomando el Congreso:
- A) Que el retiro sea totalmente libre de impuestos. Esos recursos aún no han tributado y no tiene lógica que no lo hagan al ser retirados. Lo dije en mi artículo anterior. Y no puede haber medida más regresiva. Todos deberían pagar impuesto, e ilustro con 3 casos:
· Persona con un sueldo tributable
de $500.000 (escasos recursos). Saca $2.000.000 (no tiene fondos para sacar
más). Y esa persona NO PAGARÁ IMPUESTOS. Está en la zona exenta.
· Caso de alguien que tiene un sueldo tributable
de $1.000.000 (clase media baja diría yo). Tiene fondos para retirar $3.000.000.
De ese monto, debería pagar $120.000 en impuestos por cada retiro.
· Y para alguien que tiene muy buen
pasar, sueldo tributable de $9.000.000 mensuales. El nivel de nuestros
honorables parlamentarios. Obviamente tiene fondos para sacar el máximo: $4.400.000.
Y por cada retiro la ley (cambio constitucional aprobado), le regala
$1.337.660.
Al pobre no le regala
nada y al rico, la cifra indicada. ¿Puede haber algo más regresivo?
Varios parlamentarios (me
consta 1 del Frente Amplio y una de la DC), han indicado en forma taxativa que
si el Gobierno manda una ley para complementar lo aprobado para el tercer
retiro, la tributación no es tema transable y debe aplicarse como se aprobó en
el Congreso: libre de impuesto.
2. B) El retiro de quienes están
pensionados con renta vitalicia (RV) es una atrocidad. Los fondos no son del
pensionado: se los traspasó a la aseguradora a cambio de una pensión fija de
por vida. Obligarla a dar de su dinero, con un mecanismo de restitución que no
me parece en absoluto claro, está fuera de toda lógica y de toda ley.
El
papelón del Gobierno
Cuando el acuerdo ya estaba aprobado por
el Parlamento y despachado, recién ahí improvisó un retiro modificado de última
hora a las perdidas. Pero retiro del 10% al fin, en contra de sus principios. Y
para colmo, manteniendo la figura de retiro de los pensionados en RV.
Si sabía que la reforma iba a ser aprobada
por el Congreso sí o sí, ¿por qué no proponer medidas (y negociarlas) al
principio de la tramitación sin esperar hasta el punto de que ya no había
vuelta atrás? Improvisación, torpeza, arrogancia…
La vuelta de espalda que le dieron sus
propios parlamentarios me parece patético. Veamos, a favor del retiro votaron:
ü El 68% de los diputados del Gobierno.
ü Y el 42% de sus senadores.
Claro, la medida era popular e independiente de su
racionalidad, había que apoyarla por conveniencia política.
El Gobierno ha
quedado sin apoyo, sin capacidad de manejar la agenda política. Ha perdido la
brújula y el control del timón, que lo está tomando el Parlamento.
El último
número del circo
Ayer, mientras estaba redactando parte de
este artículo se dio la noticia: “La Cámara de Diputados ya presentó el
proyecto de una nueva reforma constitucional para el cuarto
retiro”. ¡Pero si todavía no empiezan las postulaciones para hacer
efectivo el tercero!
Está claro lo que hay detrás, con el
pretexto que la gente necesita recursos: DESTRUIR EL SISTEMA DE AFP, con
el beneplácito del movimiento de “NO + AFP”, totalmente suscrito y ahora
impulsado por el Frente Amplio y el Partido Comunista, ambos habiendo declarado
que deben expropiarse los fondos de las cuentas obligatorias individuales.
¿Qué se
puede esperar?
Hasta el momento, las declaraciones de la
antigua Concertación y que de alguna manera ha sido aceptada por Chile Vamos
(Gobierno) a regañadientes, va en el siguiente sentido:
· Mantener el actual sistema de AFP
para el 10% de la cotización obligatoria y todo aumento sea administrado por
una entidad distinta aún no bien definida. Ni un peso más a las AFP.
· Sin cambios en lo que respecta al APV
y la cuenta de ahorro (cuenta 2).
El Frente Amplio y el PC lo ya dicho: fin de las AFP, expropiación de los
fondos de la cuenta obligatoria, sistema de pensiones de reparto administrado
por el Estado. Parece estarían dispuestos (algunos) que las AFP operaran como
un sistema voluntario de pensiones para quienes quisieran y pudieran optar a
él.
El problema es que mi
credibilidad respecto a lo que digan los políticos está por el suelo.
Lo que he
hecho
· Para el primer retiro, mi decisión era
no solicitarlo. Pero enojado al ver como se dilapidaban los dineros del Estado
al no cobrar impuestos, terminé por hacerlo efectivo. Si estaban botando la
plata, algo que me tocara.
· El segundo retiro no lo utilicé.
· Como he planteado en algunos de mis
artículos, mi plan era retirar menos de la pensión que me ofrecía el sistema
para mantener el capital al momento de jubilar. Lo que he logrado después de 15
años de pensionado retirando en promedio el 73% del máximo permitido por el
sistema.
· Pues bien, apenas se aprobó el primer
retiro, subí mi pensión al máximo, lo que hace traslucir una cierta duda
respecto a la confiabilidad del sistema.
· Hasta ayer, mi decisión era no hacer
efectivo el tercer retiro. A raíz de lo ocurrido en las últimas horas, lo estoy
pensando.
Y claramente, estaré atento a los próximos
acontecimientos para ir definiendo si hay algunas acciones que el panorama haga
recomendable adoptar.