Dos
años sin publicar en este blog. Las razones no son del caso exponerlas.
Pero dado mi vinculación con el tema
previsional y que ayer se aprobó la idea de legislar (84 votos a favor y 64 en
contra) sobre la propuesta del Gobierno respecto a la modificación del sistema
de pensiones, vuelvo a las andadas.
Haré comentarios respecto la situación
actual y copiaré íntegramente a continuación el artículo que publiqué en abril
de 2017 respecto a la propuesta del Gobierno de Bachelet 2, que considero mucho
más acertada que la inicial que se presentó y votó recientemente.
Veamos: El Gobierno de Piñera presenta en
la Cámara de Diputados su proyecto de ley que en lo principal consideraba:
a) Subir en forma gradual la
cotización obligatoria a cargo del empleador a 4%.
b) Dicho aumento de
cotización sería administrado por las AFP (error
incomprensible a mi entender como indicaré más adelante), abriéndose a que
pudieran también hacerlo entidades administradoras de ahorro complementario.
c) Un 0,2% también de cargo
del empleador, para un Seguro de dependencia para apoyar la pensión de quienes
tengan una dependencia funcional severa que requieran apoyo permanente de otras
personas para realizar las actividades básicas de la vida diaria. Sólo para el
60% más pobre de la población.
d) Aumentar la pensión básica
solidaria en un 10% inicial con fondos estatales, con aumentos escalonados en
el tiempo pudiendo llegar a 42%.
e) Aumentar en 15% el aporte
estatal al aporte previsional solidario. También con aumentos escalonados pudiendo
llegar a 47% a futuro.
f) Los puntos c) y d)
significan un esfuerzo financiero para el Estado de US$3.500 millones.
g) Creación de un seguro de
longevidad para el pilar solidario.
h) Mantener las actuales
edades de jubilación, con incentivos para quienes voluntariamente posterguen su
edad para pensionarse.
i) Creación de un aporte
estatal adicional para aquellas personas que hayan tenido un mínimo de años de
cotización: 16 años para las mujeres y 22 años para los hombres.
Lo malo:
Ø La tozudez del Gobierno de
insistir en que la cotización adicional fuera administrada por las AFP (con
algunas alternativas), lo que no hacía más que incendiar los ánimos en contra
el actual sistema. Para acallar por lo menos en parte la posición de “No + AFP” la única alternativa
socialmente viable es “Ni un peso más
para las FP”.
Ø Insistencia del Gobierno
en mantener su postura inicial (a pesar que parte de la oposición había
propuesto cambios) hasta el extremo que la posibilidad de iniciar el trámite de
la ley propuesta estuviera a punto de caerse.
Ø Que el aumento haya sido
de sólo el 4%, lo que será insuficiente.
Ø Al no tener mayoría en
ninguna de las 2 instancias del Congreso, el Gobierno debe tratar a la
oposición reconociendo su derecho a tener visiones distintas y respetarlas,
única forma lograr acercamientos para llegar a consensos necesarios para la
aprobación de leyes. El uso de términos como “antipatriotas”, “obstruccionistas”
y similares, aleja las posibilidades de acuerdos nacionales mayoritarios. Flaco
favor le hacen a Chile la forma como se expresan de la oposición personeros
como la ministra vocera de gobierno (Cecilia Pérez), el Ministro del Interior
(Hernán Chadwick) y el propio Presidente Piñera. Mucho más grato es escuchar
voces más ponderadas como las de Andrés Allamand, Jaime Bellolio, Hernán
Larraín o Mario Desbordes.
Ø Por su parte, la oposición
también se refiere al Gobierno en términos casi injuriosos. Las alocuciones de
políticos como la diputada Karol Cariola (PC) o el senador Navarro son
verdaderos atentados contra una convivencia pacífica y civilizada. También hay
voces que respeto, como las de los senadores Montes, Lagos Weber, Insulza y los
diputados Pepe Auth y Vlado Mirosevic e Ignacio Walker (DC ex ministro, presidente DC
y del Senado) por nombrar a algunos.
Ø Si el Gobierno hubiera
tomado la propuesta Bachelet, que no llegó a tramitarse, el conglomerado en aquel
entonces gobernante (Nueva Mayoría) no
hubiera podido negarse hoy a discutir y llegar a una reforma previsional. ¿Cómo
podrían haberse negado a un proyecto que ellos mismos diseñaron? Pero no; el
Gobierno prefirió hacer borrón y cuenta nueva.
Ø Y no malo, sino pésimo: ¿por qué la oposición, con un
amplio abanico de “sensibilidades”, desde una izquierda que apoya dictaduras marxistas
hasta un centro dispuesto a dialogar, debe actuar en bloque ante las propuestas
del Gobierno? No cejan en el intento, por suerte hasta ahora con un éxito sólo relativo.
¿Por qué no puede cada cual hacer oposición según sus propios principios y
visiones de la sociedad y deben actuar en bloque? La idea de no pocos parece
ser poner una muralla negándose a toda propuesta que venga del ejecutivo.
Lo bueno
v Que se haya rechazado la
idea de legislar en la comisión de Trabajo y Seguridad Social de la Cámara de
Diputados.
v ¿Razón? Porque obligó al
Gobierno a conversar con la DC y PR y llegar a acuerdos que permitieran que la
idea de legislar fuera aprobada en sala. Y lograr el acuerdo, entre otros, que
el 4% de cotización adicional fuera 100% administrado por un ente estatal
nuevo, con total exclusión de las AFP; incorporar la idea de solidaridad y
adelantar la fecha de efectividad de algunas de los nuevos beneficios.
v La actitud positiva tanto
de la DC como del PR para llegar a un acuerdo que permitiera destrabar el
impase y seguir el trámite legislativo, situación que no puedo menos que
aplaudir.
Pero, ¡ALERTA! Ya
hoy, al día siguiente, el Ministro de Hacienda Hernán Larraín introdujo dudas
respecto al alcance acuerdos, lo que fue tajantemente aclarado por el Ministro
del Trabajo y Seguridad Social Nicolás Monckeberg.
“Queremos señalar, en forma enfática, que
no está contemplado ni directa ni indirectamente que las AFP participen en la
gestión de este 4% adicional.
Los acuerdos
alcanzados se van a respetar”.
Realmente cuesta entender como el
Gobierno, torpemente, se pisa la cola una y otra vez.
Por otro lado: incomprensible que el
presidente de la Comisión de Trabajo de la Cámara, Sr Soto, haya inclinado la
balanza para rechazar la instancia de legislar, lo que me pareció bien pues en
ese punto las condiciones no estaban dadas. Pero luego en sala, a pesar que su
partido (DC) había llegado a un acuerdo con el Gobierno, siguió defendiendo
virulentamente la idea de no legislar. El diputado Ascencio, jefe de la bancada
DC, anunció que marginaría al diputado Soto de la presidencia de la Comisión de
Trabajo.
Veamos pues, lo que escribí hace más de 2
años en relación a la propuesta de modificación que estaba en la cartera del
Gobierno de Michelle Bachelet 2 y que está bastante en línea respecto al curso
que parece estar tomando la actual discusión.
______________________________________________________________
2017-04-07 SISTEMA DE PENSIONES: una
reforma necesaria
La comisión
de trabajo establecida por el Gobierno para proponer la reforma al sistema de
pensiones, encabezada por los ministros de Hacienda y Trabajo, entregó su
informe a la Presidencia a principio de la semana pasada. Tuvo una composición
transversal. No hubo acuerdo sobre una propuesta única.
En menos de 48 horas la Presidenta
Bachelet comunicó al país por cadena nacional los aspectos fundamentales que
contendrá el proyecto de ley del Gobierno, que se ha dicho estaría redactado en
un plazo de 3 meses.
Partiré indicando mi propuesta para dicha
reforma, que ya he ido anticipando en artículos anteriores que identifico al
final (referencias) pero ajustados a los datos que se conocen anunciados por el
Gobierno, para luego comentar las intervenciones hechas por la Presidenta de la
República y el Ministro de Hacienda.
El escenario
Son hechos de la causa:
·
En general, el sistema actual está dando pensiones
extremadamente bajas, siendo la causante más relevante la baja densidad de
cotizaciones: en promedio las personas están cotizando sólo el 50% de su vida
laboralmente activa (lagunas previsionales). Otras también importantes: a) Un
nivel de cotización de sólo el 10% del sueldo base, con tope, mientras que en
países de la OCDE alcanza a cifras del orden del 20%. b) Una edad de jubilación para las mujeres
(60 años) que no se condice con sus expectativas de vida (sobre 90).
·
Hay un malestar social por este hecho, justificado, que ha
sido monopolizado por el movimiento “NO + AFP” que ha tenido un importante
nivel de convocatoria (marchas y adhesión de varios movimientos políticos de
formación reciente). Discrepando de sus posturas, le doy el mérito de haber
puesto con fuerza el punto como primera prioridad.
·
El Gobierno, presionado por la movilización de parte de la
ciudadanía, toma cartas en el asunto y forma la “Comisión Bravo” que comenté
según indico en las referencias al final de este artículo (4) y recientemente,
la mesa de trabajo mencionada inicialmente,
orientada a generar un acuerdo amplio que fuera la base para un futuro
proyecto de ley.
·
Hace ya algunos meses el Gobierno anuncia su intención de
aumentar la cotización del actual 10% a un 15%, cuyo incremento sería de cargo
del empleador. Sobre esa base trabajó la Comisión que acaba de entregar su
informe del que sólo se conoce públicamente en sus líneas generales.
·
El sistema vigente de capitalización individual genera
riqueza (rentabilidad). De hecho, hasta la fecha, el capital para financiar sus
pensiones de quienes ya se han jubilado, en cifras redondas sólo el 30% corresponde a lo que han
cotizado y el otro 70% lo aporta la rentabilidad generada por el sistema.
Ha entregado buenas pensiones para quienes han tenido pocas o ninguna laguna
previsional y con niveles de sueldo aceptables, obteniéndose jubilaciones de
montos acordes a lo que ha sido el sueldo
imponible por el que han cotizado (tasa de reemplazo). Sin embargo los
resultados han sido abiertamente insatisfactorios para quienes no han tenido
una buena densidad de cotización, sus sueldos han sido bajos y en el caso de
las mujeres, sus pensiones están fuertemente castigadas por pensionarse a los
60 años, 5 años antes que los hombres, y tener otros tantos de mayor
expectativa de vida.
El enfoque
La modificación al sistema debe considerar
no sólo el mejoramiento de las pensiones futuras, sino las actuales, lo que
introduce una complicación importante si se toma en cuenta que las arcas
fiscales no están en condiciones de financiar un sustantivo aumento de las
pensiones actuales y las de corto y mediano plazo. No somos un país rico y
existen otras urgencias que tampoco pueden esperar: el sistema de salud, el
mejoramiento de la educación pública y seguir avanzando en la superación de la
pobreza, para mencionar las más
evidentes.
En el diseño de la cotización adicional
del 5%, estimo debe considerarse:
·
Hay que tener en cuenta el descrédito público del sistema de
las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), al que atribuyo como
responsabilidad no haber alertado hace 20 o más años que con las bajas
densidades de imposiciones (lagunas) y bajo porcentaje cotizaciones (10%), las
pensiones iban a ser en muchos casos miserables. No resulta política y
socialmente viable postular que las AFP participen de la administración de la
cotización adicional. Por venta y aceptación de la reforma, dicha administración es conveniente sea
efectuada por un organismo del Estado, especialmente diseñado para ese fin, con
normas muy claras, transparentes e independiente del gobierno de turno. No
porque crea que el Estado sea un mejor administrador, sino por realismo para
que la reforma tenga una buena aceptación ciudadana.
·
La colaboración intergeneracional: que parte del aporte de
quienes están laboralmente activos se destine a quienes ya están pensionados,
única forma de mejorar las actuales pensiones si el Estado no está en
condiciones de hacerlo. Podría hacerlo vía aumento de los impuestos generales,
pero ya sabemos que el mercado laboral y la competitividad del país no es
indiferente a una subida de impuestos.
·
La solidaridad inter género, para compensar el detrimento que
el sistema vigente significa para el género femenino.
Mi propuesta
para la cotización del 5% adicional
1. Por lo ya dicho: solamente
me parece viable sea administrada por un organismo autónomo del Estado.
2. Que sea financiado por el
empleador. Así lo anunció la Presidenta cuando comunicó que el Gobierno iba a
abordar el tema de las pensiones. Es la
única manera que la reforma tenga aceptación pública; de hecho el ciudadano
común aplaude la idea, aunque al hilar fino, salte la duda si al final no será
financiado por los propios trabajadores, a saber: a) Las empresas incluirán en
el costo laboral esa mayor cotización, pudiendo reflejarse a futuro en una disminución
de los sueldos ofrecidos en el mercado para compensarlo o b) Pasar ese costo a precios y que por lo
tanto el aporte sea hecho en definitiva por los consumidores de los productos o servicios,
o sea, toda la población. Pero aun así,
más vale no darle más vueltas al asunto y establecer que es de cargo del
empleador.
3. Dejar el sistema de
capitalización como está (10%, AFPs), por haber dado buenos resultados en los
casos de cotizaciones sin mayores interrupciones. Con ajustes y mejoras en su
manejo a ser analizadas.
4. Igualmente no introducir
modificaciones al pilar solidario, que si bien muchos dicen es insuficiente, es
un gran mérito de la Reforma Previsional del 2008 impulsada por la Presidenta
Bachelet en su primer mandato y que según datos de la Superintendencia de
Pensiones (SP) de diciembre 2016 extrapolados al año, significan un aporte
estatal de 1.900 millones de dólares al año. Un esfuerzo no menor.
5. Mantener el sistema de licitación
cada 2 años de los nuevos cotizantes, que ha significado una baja sustancial de
las comisiones de algunas AFP, otro mérito de la reforma del 2008.
6. Destino de 2% de cotización adicional
La lógica de lo que postulo está en el
artículo “Reforma sistema pensiones. Mi propuesta. Parte1” (Ref.2).
Ajustada a los anuncios hechos por el
Gobierno, mi propuesta es:
·
Distribuir mensualmente entre todos los pensionados por
igual, la recaudación adicional del 2%. Es distributivo y solidario: cada cual
aporta al fondo según sus ingresos (sueldo imponible), pero al pensionarse, todos, sin distingo de sexo ni monto de
la pensión a percibir tanto por la pensión autofinanciada como por los aportes
del pilar solidario si correspondiere, reciben exactamente el mismo monto
complementario.
·
Con los datos de la SP
del mes de diciembre de 2016: a) 5.284.337 cotizantes, b) Un ingreso imponible
promedio de $713.612, y c) 1.190.357 pensionados…da un monto adicional por persona a distribuir por igual entre todos
los pensionados de $63.359.
·
Así quedarían las nuevas pensiones comparadas con las
actuales, considerando que la Pensión Básica Solidaria (para quienes nunca han
cotizado) es de $102.897 y el Aporte
Previsional Solidario es hasta las pensiones autofinanciadas de $304.062, todo
ello sólo para el 60% más pobre de la población (hacer click para aumentar):
·
El aumento porcentual de las pensiones respecto a los montos
actuales sería:
·
En el criterio de distribución hay que tener especial
cuidado: si se pretendiera distribuir más a las pensiones menores dejando sin
beneficio a las más altas que fueron quienes hicieron el mayor aporte al fondo,
se hablaría de expropiación entrando en un conflicto constitucional. La regla
debiera ser: todos aportan y todos reciben el beneficio.
·
El desbalance que se produciría con el tiempo debido al
aumento de la proporción futura de los pensionados respecto a la población
laboralmente activa (aumento de las expectativas de vida y baja tasa de
natalidad) deberían compensarse con dos de las propuestas de la Comisión Bravo
(4):
A. Aumentar el tope imponible
del actual 75.7 UF a 109.8 UF. Esto tiene un costo para el Fisco, dado que
hasta el tope no es afectado por el impuesto a la renta (menor recaudación) y
B. Insistir en la obligatoriedad
de cotización previsional para los trabajadores independientes (a honorarios),
ya establecida en la reforma del 2008, pero que se ha ido postergando, me
imagino que principalmente por el costo que significaría para el Estado al
encarecer los servicios de los innumerables ´personeros contratados bajo dicha
modalidad. En ese sentido el Estado ha sido un pésimo empleador.
La mayor recaudación por esos conceptos
permitirían crear un colchón para desajustes futuros y, eventualmente, hasta
aumentar el monto propuesto a distribuir de $63.359. Habría que hacer los
cálculos pertinentes.
7. Destino de la cotización del 3% adicional
1. La lógica de mi propuesta está descrita en
el artículo del año 2015 “Nueva alternativa de pensión: una propuesta”,
(Ref.5) que consideraba la creación de un seguro de longevidad que pagara la
pensión a contar de cierta edad. Ese seguro se financiaba con parte del capital
existente en la cuenta de capitalización individual al momento de jubilar.
2. En el escenario actual, la
idea es que ese seguro sea financiado por el aporte del 3% adicional, lo que
favorece la alternativa.
3. Después de divulgada la
mencionada propuesta (5), voces entendidas han postulado en fechas recientes el
mismo concepto, entre ellos Guillermo Larraín, ex SP y actual académico de la Universidad de
Chile, Solange Bernstein, también ex SP (a quien le expusimos nuestra
propuesta) y José Antonio Guzmán, presidente de AFP Habitat (3).
4. En forma resumida, la
operación del sistema sería el siguiente:
a) Al pensionarse, tanto
hombres como mujeres, con el capital disponible para jubilación, se calcula
la pensión en retiro programado (RP) a un interés anual constante del 4,7% para
que los fondos se extingan al momento que el pensionado cumpla los 88 años.
b) Se mantiene la opción de
rentas vitalicias (RV), en cuyo caso las aseguradoras deberán considerar que su
cobertura es sólo hasta la edad indicada.
c) A contar de ese momento
(cumplidos los 88 años), el seguro de longevidad formado por la cotización del
3%, paga la pensión de un monto igual
en UF que el determinado al momento de jubilarse.
d) La pensión en RP, como se
hace actualmente, se recalcula anualmente. Si un año el interés ha sido mayor a
4,7%, la pensión aumentará y en caso contrario, disminuirá. La siguiente es la
evolución que habría tenido una pensión iniciada el año 2006 (caso real) que
hubiera tenido el capital en el Fondo C con la rentabilidades reales obtenidas
(Cuprum):
e) Si el pensionado y sus
beneficiarios fallecen antes de cumplir los 88 años, el capital remanente constituye
herencia, lo que deja de existir a contar de ese momento. Ese es parte del
financiamiento del sistema, pues actualmente, independiente de la edad de
fallecimiento, siempre hay un remanente que pasa a los herederos y en la
alternativa propuesta, hasta esa edad los fondos son utilizados 100% por el
pensionado.
f) Si fallece el causante, la
pensión a ser pagada por el seguro a sus
beneficiarios (normalmente la o el cónyuge) a contar del momento que a éste hubiera
cumplido los 88 años, dependerá de su edad y deberá definirse un mecanismo para
su determinación (cálculo actuarial) y cuyo monto quedará establecido desde el
primer momento al solicitar el SCOMP. En edades similares de ambos cónyuges,
esa pensión debiera ser del orden del 70%. Pero si quien sobrevive es muchos
años menor, obviamente son más años a financiar y debería la pensión ser menor.
g) Como en la actualidad, se
mantiene el SCOMP y su estructura general, pero adecuada al cambio que se
propone.
·
Esta alternativa de
pensión, analizados 13 casos de la vida real entre los años 2010 y 2017 de
SCOMPs a los que he tenido acceso, significaría un aumento de las pensiones
actuales entre un 10 y un 20%.
·
Lo que se propone independiza los géneros de las tablas de
mortalidad (expectativas de vida) siendo el cálculo igual para hombres y
mujeres (solidaridad inter género). A igual capital y edad, la pensión sería la
misma para ambos.
·
El cálculo actuarial fino para determinar el
autofinanciamiento del seguro deberá ser realizado: para verificar la
factibilidad que el seguro empiece a operar a contar de los 88 años (podría ser
algo antes o después de esa edad) y el monto igual al 100% de la primera
pensión. Traté de hacer el complejo cálculo, pero no pude obtener la
composición etaria de los actuales pensionados, dato imprescindible para poder
realizarlo.
·
La diferencia entre lo propuesto y la alterativa de enterar
el 3% a cuentas individuales, igual que la de capitalización actual pero
administradas por un organismo distinto a las AFP, es que la alternativa
propuesta aumentaría las pensiones una vez que el sistema del 5% adicional esté
a régimen (entre 6 y 8 años probablemente), mientras que en el esquema de
cuentas individuales, las pensiones se incrementarían en 30% pero para
quienes estén recién iniciando la cotización, o sea en unos 40 años más.
Para un hombre hoy de 45 años, la mayor cotización del 3% significaría un
aumento de la pensión del 10% respecto a la mantención del sistema vigente, y
en el caso de las mujeres, la pensión aumentaría en 9%.
·
Si se privilegia un resultado de corto a mediano plazo, el
seguro de longevidad parece interesante, pero en el largo plazo, la
capitalización individual daría pensiones más altas. Tema a discutir.
Con respecto a las alternativas indicadas, al igual que en cualquier
sistema de pensiones, deben hacerse ajustes parametrizados cuando cambian las
condiciones. En lo principal, esos parámetros son: a) Edad de jubilación, b)
Porcentaje de cotización (el 15% puede que a futuro sea insuficiente, c) Montos
de la pensión básica solidaria y del aporte previsional solidario, d) Monto a distribuir por la cotización
solidaria del 2% y e) Rentabilidad para el cálculo de la pensión con seguro de
longevidad, edad a partir de la cual el seguro opera y monto de las pensiones
para beneficiarios al fallecer el pensionado.
La reforma que
propondrá el Gobierno
Sólo se conocen las primeras
declaraciones, con aspectos generales sin detalles. A ellos me referiré (comentarios
en cursiva y negrilla).
Lo anunciado por la Presidenta en
cadena nacional
Ø No hay respuestas mágicas.
Los cambios deben ser graduales. De acuerdo.
Ø Un sistema mixto donde la
solidaridad vaya de la mano con el esfuerzo personal. De acuerdo.
Ø Un 2% de la cotización
adicional irá a un seguro de ahorro colectivo de carácter redistributivo e
intergeneracional con apoyo a las pensiones más bajas. Es lo que propongo en términos
conceptuales.
Ø Un 3% irá a cuentas
personales heredables. Mi propuesta es distinta (seguro de
longevidad) pero también parece una alternativa válida.
Ø Aumento será gradual en un
período de 6 años. Por el efecto que ya comenté en los sueldos y quien realmente financia
el costo, la gradualidad es lo recomendable.
Ø Subirá de inmediato un 20%
en promedio las pensiones entregadas por las AFP. Fue una mala estrategia de venta,
pues ya muchos han dicho que para quien tiene una pensión de $120.000, subir a
$144.000 no es solución. Ya sea lo que he propuesto para el 2% o lo que vaya a
considerar el gobierno, las pensiones bajas subirían mucho más y claro, las
altas, mucho menos. En lo que propongo, las pensiones básicas solidarias
subirían un 61,57%. Pero lo del 20% ha quedado grabado en las audiencias.
Ø A futuro el aumento
promedio será de 50%. Es claro: 50% más de cotización y 50% de
mayor pensión. Pero ese “futuro” es a 40 años plazo.
Ø La administración estará a
cargo de una entidad pública y autónoma, con reglas estrictas y altos
estándares profesionales. Lo dicho: única opción que no tenga un
rechazo cerrado de quienes abogan por abolir las AFP, a pesar que el manejo del
3% será lo mismo que hoy hacen las AFP. Pragmatismo puro.
Lo comentado por el ministro Valdés
en entrevistas:
·
No subirán la edad para pensionarse de las mujeres pero
establecerán incentivos si se pensionan más tarde. Idea a mismo capital y edad
que los hombres, tengan la misma pensión. Razonable, pues obligatoriedad de
pensionarse a los 65 años, si bien es lo lógico, tiene una enorme resistencia.
Hacerlo sería un problema para la aprobación de la reforma. Nuevamente,
pragmatismo. Bien. No se hace cargo de las mayores lagunas femeninas por
concepto de maternidad, lo que debería mejorarse aumentando el “bono por hijo
nacido vivo” establecido en la Reforma del 2008, pero cuyo monto es
insuficiente.
·
Los de salarios más altos ayudarán los de más bajos. Sin conocer la fórmula, mi
propuesta apunta en el mismo sentido.
·
Administración por el organismo propuesto sería más barato,
pues no habrá fuerza de venta ni necesidad de múltiples oficinas en todo el
país. Habrá que ver si el estado es así de eficiente. Por otro lado, las AFP
desearían ser ellas quienes administran la mayor cotización, indicando que lo
harían a costo cero pues su comisión es sobre el sueldo imponible. No les creo:
manejarían una mayor cartera de inversiones y seguramente aumentarían el
porcentaje de comisión.
·
Que traspaso
intergeneracional sea transitorio. No entiendo: siempre quienes hoy cotizan
estarán financiando el ahorro colectivo y las pensiones vigentes, como una
especie de “sistema de reparto modificado”.
·
A le pregunta: “Si el sistema funciona, ¿por qué no permitir
la elección que el 13% de capitalización
individual vaya totalmente al organismo estatal o a las AFP?” Su respuesta: esa es una discusión que se
podrá tener en 10 años más, una vez se demuestre cómo funciona el sistema. Totalmente
de acuerdo: habrá que verlo en el momento apropiado; no ahora.
·
Propone eliminar el Fondo B. Yo eliminaría también el D.
·
No es fácil que la reforma salga este año por su complejidad.
Le
agregaría “y las pasiones que provoca”. Una pena, pero creo será así.
Comentarios finales
ü La coordinadora “No + AFP”
(Sr. Mesina) consideró insuficiente lo que se propone, reconociendo algunos
aspectos positivos. Yo esperaba una oposición más radical.
ü Por su lado la Asociación
de AFP (Sr. Santa Cruz) se ha opuesto a la propuesta y considera ellos deberían
manejar la cotización adicional. Pésima estrategia a mi entender. Hasta aquí no
se toca la lógica del actual sistema (de lo que me alegro), que por lo demás,
es su negocio. Lo recomendable pareciera ser guardaran un discreto segundo
plano en las discusiones, sin pronunciarse ni en contra ni demasiado
partidarios. Dejar que los organismos competentes hagan su trabajo y presenten
el proyecto correspondiente.
ü Y la oposición ya se ha
declarado en contra (Nota: la oposición en ese momento es actualmente gobierno),
indicando que la mayor cotización debe ir 100% a las cuentas individuales y las
mejoras a las pensiones bajas debe hacerse con impuestos generales. Pero son
contrarios a subir los impuestos. Una posición inconsistente además de irrealista
para una aceptación ciudadana mayoritaria.
ü Está claro mi apoyo a lo
hasta aquí presentado por el Gobierno, haciéndose cargo de las falencias que
tiene el sistema vigente dentro de lo posible y viable.
____________________________________________________________________
Referencias a artículos anteriores
relativas al tema
1. 2017-01-28 LAS AFP EXPROPIAN EL DINERO DE LOS TRABAJADORES
Expongo
lineamientos del destino del 5% de cotización adicional
2. 2016-08-24 Reforma sistema pensiones. Mi propuesta. Parte1
Los
principios, que no voy a repetir, siguen hoy siendo igualmente válidos, aunque
las cifras tienen correcciones.
3. 2016-08-09 Reforma Previsional: UNA EXCELENTE PROPUESTA
Referencia
a trabajo hecho sobre conveniencia de establecer un seguro de longevidad y
propuestas de entendidos en el tema previsional que postulan la misma idea.
4. 2016-07-28 Informe Comisión Bravo
Mi
análisis al Informe de referencia.
5.
2015-03-24 Nueva
alternativa de pensión: una propuesta
Mi propuesta en conjunto con el Colegio de Ingenieros
estableciendo un seguro de longevidad financiado con parte del capital
acumulado al momento de pensionarse que aumentarían las pensiones entre un 10y
un 20%.